Febrero no es un mes para quedarse en casa. En Calella disfrutamos de más de 300 días de sol al año que nos empujan a vivir activamente la calle. Esta abundancia de días abiertos y puros, tocados por la brisa mediterránea, nos llenan de vitalidad. Energía que toma forma y color durante el carnaval anual: el Carnaval del Alt Maresme.
Es la fiesta más vibrante y vistosa del invierno calellense. Un concurso de originalidad donde comparsas y carrozas llevan su alegría a grandes y pequeños, locales o visitantes. Durante la fiesta, plumas y purpurina recorren bailando las calles. El desenfreno forma un desfile y la música se siente en todas partes. Es un estallido de luz y color que, cada año, recuerda a la primavera que nunca nos llega a abandonar. Empieza a pensar en tu disfraz.